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Según el Libro Blanco 2020 sobre la salud bucodental en España, el 10% de la población infantil se ha sometido a un tratamiento de ortodoncia. En muchas ocasiones, los padres buscan asesoramiento sobre la necesidad de sus hijos de llevar o no ortodoncia y, en ese caso, se preguntan cuándo es el mejor momento para iniciar el tratamiento, qué clase de aparato necesita y otras cuestiones relacionadas con la salud bucodental de los más pequeños de la casa. En este artículo, desde nuestra clínica dental en Albacete, te explicamos todo lo que debes saber sobre la ortodoncia para niños.

¿Cuándo debería visitar con mi hijo/a al ortodoncista por primera vez?

 La Sociedad Española de Ortodoncia y Ortopedia Dentofacial (SEDO) recomienda llevar a los niños a visitar al ortodoncista para una revisión a los seis años, salvo que se detecten problemas muy específicos antes de esa edad. El dentista puede determinar, en todo caso, si el niño o la niña muestra signos de posibles problemas en el desarrollo de su dentición y si requiere diagnóstico y tratamiento por parte del experto en ortodoncia de la clínica.

¿Qué problemas deben tratarse con ortodoncia para niños?

Es importante que sea el profesional quien decida el tratamiento más adecuado en el caso de cada niño. Pero existen algunas señales que nos indican posibles problemas que necesiten ser tratados para evitar futuras complicaciones.

  • Malos hábitos como chuparse el dedo, respirar con la boca abierta o colocar la lengua en los espacios interdentales.
  • Dientes torcidos o apiñados. Cuando los niños pierden los dientes de leche, su boca necesita un tiempo para colocar las piezas definitivas. Sin embargo, la detección precoz del mal alineamiento de los dientes puede ayudarnos a corregir su posición y ahorrarnos problemas más adelante.
  • Maloclusión o mala mordida. Se produce cuando la mandíbula superior es más grande que la inferior (sobremordida) o cuando la inferior es de mayor tamaño que superior (mordida invertida).

¿Qué tipos de ortodoncias para niños existen?

A rasgos generales, podemos distinguir dos tipos de ortodoncia:

  • Ortodoncia interceptiva o preventiva: Su uso se recomienda cuando existe maloclusión desde edad temprana, en muchas ocasiones durante la dentición temporal o mixta. Este tipo de ortodoncia –normalmente de quita y pon- se emplea para evitar que la mala mordida se siga desarrollando y acarree problemas de salud y/o estéticos. Suelen ser tratamientos cortos e indoloros para el niño.
  • Ortodoncia correctiva: Son tratamientos que corrigen un problema dental consolidado. Suelen recomendarse con la dentición definitiva, por lo que este tratamiento se aplica en niños mayores de once años y, sobre todo, en adolescentes y/o adultos. En función del diagnóstico, el ortodoncista decidirá si la ortodoncia apropiada es funcional, removible –muy común en la corrección de mordida cruzada- o fija –los llamados brackets o bandas, ampliamente utilizados para corregir la posición de los dientes desplazados-.

En ocasiones, además, se puede requerir el uso de aparatos extraorales o casquetes para conseguir resultados óptimos. Se recomienda su uso por la noche y pueden resultar muy útiles a la hora de corregir problemas mandibulares.

Al finalizar el tratamiento con ortodoncia, los retenedores consiguen que los dientes se mantengan en su posición correcta.

¿Cuánto duran los tratamientos con ortodoncia infantil?

La duración de un tratamiento de ortodoncia infantil depende de muchos factores, como la edad del niño, el diagnóstico, el tratamiento elegido y la evolución del mismo. Generalmente, los tratamientos muestran mejores resultados en niños de menor edad, ya que sus huesos son más moldeables. El tiempo de tratamiento puede variar entre los 12 y los 30 meses de ortodoncia activa.

¿La ortodoncia para niños requiere algún cuidado específico?

El factor más importante en el cuidado de la ortodoncia es la higiene para evitar la aparición la aparición de caries y otra enfermedades dentales. Debemos concienciar a los más pequeños de la importancia de un buen cepillado, del uso de cepillos interdentales y de que hay que evitar consumir algunos alimentos como chicles y caramelos (que podrían dañar el aparato).

Mientras dure el tratamiento, las revisiones periódicas en el dentista son especialmente importantes para llevar a cabo los ajustes necesarios, realizar limpiezas profesionales y detectar posibles problemas como placa, sarro o caries.

Los tratamientos de ortodoncia en niños deben ser estudiados y diagnosticados por un experto. En Centro Avanzado de Odontología Belmonte te asesoraremos sobre el tratamiento más adecuado para los pequeños de la casa. ¡Os esperamos, familia!